LETARGO DE CASAS VACÍAS. De la serie "Manicomio de locuras púrpuras"
rideau flambe
Camino descalzo en las casas vacías, como el gato imaginario amamantado con la sangre complicada de los pétalos marchitos: Novios que se suicidaron en la cérvix de un océano crepuscular.
Mis manos huelen a hijos nonatos y mis ojos experimentan la cabellera herbórea de los espantapájaros muertos de tristeza púrpura.
Camino descalzo en las casas vacías, como una bola de cristal que atraviesa rodando ese gesto perdido de los niños que sueñan relámpagos.
Es enorme el espacio, pero limitado por un juego de luces sombrías, con cubos y cúpulas, con ventanas semiabiertas al parpadeo de las aves más vespertinas. Cuál es mi atuendo: Estoy envuelto de cortinas. En una jaula tengo la luz matutina y con ella alimento los peces.
Casas vacías, sin muebles.