petalthornchild
No lo juzgues si una noche lo desnudas ante tu cama o en el asiento trasero de tu soledad; es sólo una espina recostada en un pétalo –si acaso te gustan esas metáforas–; una hebra de esa belleza que nunca comprenderás.
No lo juzgues si una noche lo desnudas ante tu cama o en el asiento trasero de tu soledad; es sólo una espina recostada en un pétalo –si acaso te gustan esas metáforas–; una hebra de esa belleza que nunca comprenderás.