Ñ ñ
Sumerge
los pies
y los peces ludientes pellizcan sus dedos.
Al lamerse la luz y la sombra
el agua es un tegumento verdoso
—un verde abundante
de matices concisos
y
que muchas vidas después compondrán una forma
de
cristal recipiente
vahado de trances.
Sumerge los pies
y su introspección abarca todo el instante
—saturación de intervalos simultáneos
y
que en tantas vidas ulteriores
concertarán
una reminiscencia
innómine.
Sumerge los pies
y una música adentro
vuelve y revuelve
las tonalidades del espectro.
Sumerge los pies y acontece un ensamble
como una película donde vuelan los peces
—sin alas propiamente.
Sumerge los pies
y una música vuelve
—locomoción fílmica del adentro
posterior
repentina
recurrente.
Imagen: Verde botella, sopor de mezcal y paisaje, en un letárgico instante de Etla, diciembre de 2017.