Los pájaros traen pedazos de cielo [Frag.]
Melancolía y Depresión despertaron atados de brazos en la
misma cama, sin residuos de amor pero con el aroma letárgico posterior al deseo.
El insomnio anterior apenas es una transpiración de las sábanas, un vapor con
olor a cigarros, una escena brumosa como una película cuya reminiscencia sólo
es una línea de ardor en las raíces negras de las pestañas que median entre el
estrago interior y el mundo fotosensible. El mediodía es una canción que
rechina infectada de pájaros, con la percusión lentísima del aire que aletea
atascado en las nubes destripadas como una jalea gris que empalaga el intelecto
meteorolábil de los solitarios.